NUESTRO CURSILLO 54 HA COMENZADO YA
SU CUARTO DÍA.
¡BENDIGAMOS AL SEÑOR!
Actualizado 27 abril 2012 De prostituta a conversa |
Una ex prostituta, Linda Watson, que se convirtió, se encontró personalmente con Juan Pablo II para pedirle que rezara por ella y por su trabajo a favor de otras mujeres que quieren abandonar el «comercio» sexual.
Cuando Linda Watson se encontró con el Beato Juan Pablo II se acordó del relato del Evangelio sobre la mujer de mala reputación que encontró a Cristo. «No podía creer que estuviera realmente frente a él», reconoció Watson a Zenit tras la audiencia con el Papa. «Ha sido verdaderamente extraordinario», declaró. «Empecé a decir en polaco, mi segunda lengua, “¡Padre Santo mío!”. ¡La experiencia ha sido entusiasmante, pero a la vez de gran humildad!» Linda Watson pudo dejar las calles --tras más de 20 años en el comercio sexual-- para convertirse y, con ayuda de su arzobispo, levantar casas para prostitutas deseosas de salir de ese tipo de vida. Se cuenta entre las principales promotoras de la campaña contra la legalización de la prostitución en su país, Australia, y fue elegida en 2003 en la nación como «la mujer más inspiradora del año». La propia Watson relata su implicación en las redes de la prostitución: «Tuve una vida difícil como madre soltera con tres hijos, cada uno de los cuales no tenía más que el suelo para dormir. Así que, cuando una mujer de apariencia pudiente me tocó en el hombro en el salón de té de mi humilde oficina y me dijo que podía ganar 2.000 dólares a la semana simplemente dando masajes, me vi muy tentada». La mujer en cuestión intentaba convencerla haciéndole ver la posibilidad de limitarse a una prueba de dos meses. «Nadie lo sabría y después podría dejarlo», le aseguró. En poco tiempo Watson se dio cuenta de la verdad, pero ya era demasiado tarde: «Tan pronto como empiezas, pierdes tu dignidad. Estás vendida» --recordó--. «Mi primer cliente era directivo de alto nivel de los medios e inmediatamente fue como si hubiera sido vendida como un trozo de carne a todos sus millonarios». También describió cómo la situación llegó a estar «fuera de control». El dinero y la manipulación «eran un tipo de red de seguridad que te pones alrededor» y si «intentas dejarlo para empezar una nueva vida no tienes dónde ir para recuperar el respeto y reconstruir una vida». Abandonar el comercio del sexo parecía imposible hasta que «invitó a Dios en su corazón por pura desesperación». Fue el día en que murió la princesa Diana de Gales. «Por primera vez me di cuenta verdaderamente de que la riqueza y el poder no eran la respuesta a todo --relata--. Ciertamente no le habían salvado la vida». Linda decidió buscar trabajo, pero nadie la contrataba. Entonces sintió que Dios le había dado la misión de salvar a otras mujeres atrapadas en la prostitución, pero una vez más nadie se mostró dispuesto a ayudarla. «No sé cuántos cientos de iglesias me rechazaron, hasta que llegué a la puerta de la oficina del arzobispo católico --reconoce--. Él percibió mi visión de futuro». Para monseñor Barry Hickey, arzobispo de Perth (Australia), aquel día obtuvo una respuesta a sus oraciones. El prelado relató a Zenit que antes de encontrar a Linda Watson no lograba hallar el modo de desbaratar la industria del comercio sexual. «Sabía que enviar a un asistente social normal en el terreno no llevaría casi a nada --admite--. Necesitaba a alguien que conociera la actividad desde dentro. Y ella fue mi ángel de la esperanza». Así comenzó el ministerio de este equipo: establecer casas de recuperación para prostitutas --«Linda’s Houses of Hope» (Las casas de la esperanza de Linda)-- para proporcionar refugio, asesoramiento y protección, entre otros medios. Según el arzobispo Hickey, Linda Watson frecuentemente tiene que trabajar con las víctimas partiendo de cero. «Algunas de las jóvenes vienen a mi puerta sin sus prendas, hasta sin dientes –revela Linda--. Algunos hombres les hacen saltar los dientes a golpes, así que debemos ocuparnos de atender todos estos aspectos». A la vista de la difusión de la violencia y de las drogas y con chicas que «atienden» «de ocho a quince clientes al día», Watson se irrita al oír a políticos que tratan de sacar adelante proyectos de ley para legalizar la prostitución. «La prostitución te destruye --alerta--. No te estimas y te parece que nadie podría amarte jamás». Admite que preguntaría a los políticos: «¿Les gustaría que esto le ocurriera a sus hijas o hermanas?». «Estoy profundamente impactada, y creía que nada podría afectarme», reconoce Linda refiriéndose a las víctimas. «Están tan destruidas que están como muertas, a modo de “muertos vivientes”. Si la gente viera esto nunca querría la legalización [de la prostitución]». En su labor, Watson se ha inspirado en la Madre Teresa de Calcuta --a cuya beatificación acudió-- y en Juan Pablo II. «Sé que tenemos un pasado muy distinto --dice entre risas--, pero también sé que nosotros amamos amar». Su vida actual no está exenta de peligros. Su éxito en derribar las propuestas de ley de legalización y en exponer los abusos contra las mujeres le han ganado muchos enemigos. Con todo, Watson lo considera como una pequeña cruz que hay que ofrecer a lo largo del camino, lo que se podría definir como un martirio moderno. «Estoy casi acostumbrada a recibir ataques, disparos y amenazas de muerte», apunta Linda Watson. «Camino con Dios e intento esquivar las balas», concluye. Tomado de Zenit, ZS04092320 |
Según el vaticanista Sandro Magister |
El gesto contracorriente del Papa en el temporal de Cuatro Vientos, el mejor icono de su pontificado |
Nadie lo ha dicho, una semana atrás, en el diluvio de homenajes que se desató por el séptimo aniversario de Benedicto XVI como Papa: el elemento que más ha develado el sentido profundo de su pontificado ha sido un temporal. Un temporal que dio pie a una actitud y gesto "audaz" y "contracorriente" del Papa Benedicto XVI en una tórrida noche de agosto de 2011 en Cuatro Vientos con ocasión de la JMJ 2011 es, según el prestigioso vaticanista Sandro Magister, "el elemento que más ha develado el sentido profundo de su pontificado". En el "diluvio de homenajes" por el séptimo aniversario del pontificado de Joseph Ratzinger, apunta Magister, nadie a dicho nada respecto a lo que sucedió frente a un millón de jóvenes y justo en el medio de un violento temporal, señalando que el actual Papa "será recordado más por las homilías que por las encíclicas"... y "por sus gestos audaces, a contracorriente". El experto en asuntos vaticanos y eclesiales, recuerda que "era una noche tórrida en Madrid, en agosto de 2011. Frente al papa Benedicto, en la explanada, un millón de jóvenes, con una edad promedio de 22 años, desconocidos. Imprevistamente un remolino de agua, de relámpagos y de viento se abate sobre todos, sin ninguna posibilidad de cubrirse. Vuelan por el aire manojos de focos, vuelan lejos carteles, también el Papa se moja. Pero él se queda en el lugar, frente al explosivo regocijo de los jóvenes por el inesperado espectáculo no programado que brinda el cielo". "Cuando cesa la lluvia, el Papa pone al costado el discurso escrito y dirige a los jóvenes pocas palabras. Invita a mirar no a él, sino a ese Jesús que está presente en la hostia consagrada sobre el altar. Se arrodilla en silencio y en actitud de adoración. Lo mismo ocurre en la explanada: todos se arrodillan sobre la tierra mojada, en medio de un silencio absoluto, durante una buena media hora". El periodista italiano comenta en un artículo publicado en www.espressonline.it que "al evaluar este papado, pocos han comprendido la audacia de estos gestos contracorriente. Pero cuando Benedicto XVI los cumple y los explica, lo hace con la actitud apacible de quien no quiere inventar nada propio, sino simplemente ir al corazón de la aventura humana y del misterio cristiano". La Eucarístía Otro de los gestos del Papa resaltados por Magister es cuando Benedicto XVI convocó su primer sínodo, en el 2005, dedicado a la Eucaristía, y en el que quiso que se proyectara durante todo el encuentro un fresco de Rafael, en una pantalla colocada frente a los obispos allí congregados de todo el mundo. La obra del pintor era la "Disputa del Santísimo Sacramento", en el que puso la hostia consagrada en el centro de todo, sobre el altar de una grandiosa litúrgica cósmica que ve interactuar al Padre, al Hijo, al Espíritu Santo, a la Iglesia terrenal y celestial, al tiempo y a lo eterno. Las homilías de Benedicto XVI, como San León Magno "De Joseph Ratzinger se han discutido las doctas exposiciones en la universidad de Ratisbona y en el Collège des Bernardins de París, en el Westminster Hall de Londres y en el Parlamento Federal de Berlín. Pero un día se descubrirá que el mayor distintivo de este Papa son las homilías, al igual que antes de él lo han sido para san León Magno, el Papa que detuvo la invasión de Atila", continúa Magister. Las homilías, apunta, "son las palabras de Benedicto XVI que no se tienen en cuenta. Las pronuncia durante la Misa, peligrosamente cercano, entonces, a ese Jesús que está vivo y presente en los signos del pan y del vino". "A la fe nula o escasa de tantos hombres de hoy, en las Misas banalmente reducidas a abrazos de paz y asambleas solidarias", Benedicto XVI "le ofrece la fe sustancial en un Dios que se hace realmente próximo, que ama y perdona, que se hace tocar y comer".
Tormenta JMJ Madrid.
20/08/2
Lea el artículo completo de Sandro Magister aquí.http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=22222
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Tras «La amarga Pasión de Cristo» | |||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
La vida oculta de la Virgen sale a la luz gracias a las visiones de la beata Ana Catalina Emmerich | |||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
Todo lo que la Biblia no cuenta sobre su infancia, juventud y relación con José y Jesús, y su vida tras la resurrección de su Hijo. De la mano de Voz de Papel, acaba de hacer su aparición en el mercado editorial en español "La vida oculta de la Virgen María" una obra que recoge las visiones de la beata, Ana Catalina Emmerich, que presentan con asombrosa minuciosidad diversos aspectos de la vida de la Madre de Dios como su infancia, juventud y relación con José y Jesús, y su vida tras la resurrección de su Hijo que la Sagrada Escritura no cuenta. Por primera vez se publican en español estas visiones de la monja estigmatizada del siglo XIX. Aunque no son dogma de fe, la Iglesia las considera de enorme valor para acercarse a la figura de la Virgen. La obra, que recoge escrupulosamente las notas tomadas por Clemente Brentano de las visiones de la mística de Dulmen, incluye las narraciones de la religiosa sobre los antepasados de la Virgen, su Inmaculada Concepción, su nacimiento y sus primeros años, el ingreso y la estancia en el Templo, la boda con San José, la Visitación a su prima Isabel, los nacimientos de San Juan Bautista y de Jesús, la caravana de los Reyes Magos, la huida a Egipto, la matanza de los Inocentes, la permanencia de la Sagrada Familia en Egipto y el regreso a Nazaret, la muerte de San José y su estancia en Éfeso con San Juan y el final de su vida terrena. Según señala el traductor al español de la obra, José María Sánchez de Toca, "todo ello, enhebrado con multitud de noticias históricas y geográficas sobre esenios y caldeos; Roma y el antiguo Egipto; Job, Abraham, Moisés, Elías y Tobías; o el Arca de la Alianza". Sobre el valor histórico de las visiones recogidas en este libro, subraya Sánchez de Toca, a modo de ejemplo, que "cuando Ana Catalina señaló dónde se encontraba en Éfeso la casita de la Virgen [lugar de peregrinación de millones de feligreses]... los arqueólogos, sin más que sus indicaciones, la encontraron". ¿Quién fue Ana Catalina Emmerich? Una religiosa (1774-1824) cuyas visiones vienen asombrando a toda una época. Ingresó a los 28 años en el convento agustino de Agnetemberg (Dülmen), en Westfalia. No tardaron en aparecer en su cuerpo cinco llagas como las de Jesucristo, lo que dio lugar a una dura investigación. Llegó a ser encarcelada y sometida a vigilancia día y noche con el objeto de averiguar el origen de esas heridas, que no pudo determinarse. Juan Pablo II la beatificó en 2004. Brentano, cumbre del Romanticismo alemán Clemente Brentano, una de las cumbres del Romanticismo alemán, tuvo noticia de la religiosa estigmatizada y acudió a visitarla. El poeta residió en Dülmen seis años con el único propósito de redactar las visiones que Ana Catalina le iba narrando. Estos escritos constituyen una de las obras más extraordinarias de la literatura mística, de enorme impacto en la conciencia religiosa de su tiempo, y con un influjo que aún perdura en nuestros días. "La amarga Pasión de Cristo" y "La Pasión" de Mel Gibson Según sus editores, junto a "La amarga Pasión de Cristo", que sirvió de inspiración para la película "La Pasión" dirigida por Mel Gibson, esta "Vida oculta de la Virgen María" constituye "un aporte de incalculable valor para aquellos que quieran conocer y amar a Jesús de la mano de su Madre".
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