LA AMISTAD Y CURSILLOS.
Las Ideas Fundamentales de nuestro Movimiento nos dicen que, “por la vía de la amistad se puede compartir todo: lo que se es, lo que se hace y lo que se tiene.” (IF #488).
El padre Hermógenes Castaño de Venezuela, en su rollo Núcleos de Comunidad del libro titulado 54 Temas sobre el Movimiento de Cursillos de Cristiandad (Coordinado por el Rev. Cesáreo Gil) nos dice que “la amistad exige una donación y una aceptación libre, gozosa y amorosa de lo que cada uno hace, tiene y es. El primer paso para que surja la amistad es dar al otro lo que uno hace, siempre y cuando esa operación sea la realización de la propia personalidad. El segundo paso es dar al otro lo que uno tiene, lo que llamamos ‘nuestro haber’: bienes externos a la propia individualidad y bienes integrantes del propio ser. El tercer paso, el que constituye realmente la auténtica amistad, es el dar al otro lo que uno es, la realidad de la propia persona, (Cristo los llama amigos, porque a ellos, y solamente a ellos de entre sus contemporáneos, les ha confiado los secretos de su vida; lo que Él ha oído al Padre) (Cf. Jn 15, 15).
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