Carta Pastoral de Mons. Reig Pla con ocasión del ''Año de la fe''
“El que cree tiene vida eterna”
Carta Pastoral de Mons. Reig Pla con ocasión del “Año de la fe”
“La fe actúa por la caridad”
“No podemos, como sucede con frecuencia, dedicarnos a gestionar la decadencia de la Iglesia”
“Esta es la hora de la Nueva Evangelización”
Carta Pastoral de Mons. Reig Pla con ocasión del “Año de la fe”
“La fe actúa por la caridad”
“No podemos, como sucede con frecuencia, dedicarnos a gestionar la decadencia de la Iglesia”
“Esta es la hora de la Nueva Evangelización”
- Mons. Juan Antonio Reig Pla, Obispo de Alcalá de Henares ha hecho pública una carta pastoral, con ocasión del Año de la fe, titulada: “El que cree tiene vida eterna”.
- En dicha carta, tras una introducción, trata un tema de gran trascendencia para todo ser humano: la dificultad de creer. También aborda ciertas ideologías contrarias a la fe: agnosticismo, relativismo moral y nihilismo.
- A continuación ofrece brevemente a los lectores la respuesta de la fe ante la situación en la que nos encontramos.
- En un tercer apartado indica algunas de las características de la fe cristiana: la fe es conocimiento, la fe es obediencia, la fe es confianza.
- En el siguiente epígrafe Mons. Reig explica por qué “el que cree tiene vida eterna”.
- En el quinto punto introduce el tema de la transmisión de la fe y el modo de llevarla adelante: la Palabra de Dios, el Credo o profesión de fe, la liturgia, los sacramentos y la piedad popular, el Catecismo de la Iglesia Católica y el Concilio Vaticano II. Monseñor Reig insiste en la necesidad de una nueva evangelización en la Diócesis de Alcalá de Henares; nueva evangelización que en esta carta pone bajo la protección y guía de la Santísima Virgen María, de su esposo San José y de San Juan Crisóstomo (uno de los grandes padres de la Doctrina Social de la Iglesia), todos ellos patronos del Concilio Vaticano II.
- La fe actúa por la caridad. En esta sección Mons. Reig indica la importancia del Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia para llevar adelante la evangelización; así mismo, anuncia la próxima inauguración de la Casa de acogida “San Diego de Alcalá”.
- En la misma sección el Obispo propone la llamada “Campaña del 1%”: se trata de aportar voluntariamente el 1% de los ingresos anuales de la familia o de las personas individuales en favor de una nueva casa para pobres que necesiten comida y alojamiento durante un periodo establecido. El importe de este 1% del salario personal o de los ingresos familiares irá destinado a la reconstrucción del antiguo edificio de las Hermanas de la Caridad en la ciudad de Alcalá de Henares y que será regentado por la Cofradía del Cristo de los Desamparados y la Virgen de las Angustias.
- En el apartado siete “por los caminos de la nueva evangelización” Mons. Reig habla de la necesidad de un nuevo espíritu. Tiene que nacer un espíritu de entusiasmo por la evangelización. No podemos, como sucede con frecuencia, dedicarnos a gestionar la decadencia de la Iglesia. El Obispo propone una escuela de evangelización como paso hacia la indispensable introducción en todas las parroquias de la Diócesis de un “Catecumenado de jóvenes y adultos”, según el modelo de la “Iniciación Cristiana”. En el fondo se trata de poner a la diócesis en estado de misión. También aquí aborda la cuestión de las mediaciones: la familia, la escuela, las parroquias, monasterios, movimientos, comunidades y asociaciones, el Centro Diocesano de Orientación Familiar, el Pontificio Instituto Juan Pablo II para estudios sobre el matrimonio y la familia, el Instituto Diocesano de Teología, las delegaciones diocesanas. El campo del trabajo, la empresa, la actividad política, sindical y asociativa, también es un terreno que está llamado a recibir la siembra del Año de la fe. Como comprendió San Juan Crisóstomo y recuerda el Papa Benedicto XVI “no basta con dar limosna o ayudar a los pobres de vez en cuando, sino que es necesario crear una nueva estructura, un nuevo modelo de sociedad; un modelo basado en la perspectiva del Nuevo Testamento”.
- Los testigos de la fe. En esta sección Mons. Reig recuerda que son muchos los testigos de la fe con los que se ha visto enriquecida la Diócesis Complutense -entre ellos el próximo Doctor de la Iglesia San Juan de Ávila-, subrayando que precisamente en este año estamos celebrando el LXXV aniversario del martirio de los 119 beatos cuyas reliquias descansan en Paracuellos de Jarama. Todos ellos serán fuente de bendiciones, pero también de ejemplo e inspiración para nuestra vida familiar, política, social, e incluso económica.
Textos que Mons. Reig propone leer y meditar:
- La Sagrada Biblia.
- El Catecismo de la Iglesia Católica.
- El Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica.
- Los documentos del Concilio Vaticano II.
- El Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia.
- El Directorio sobre la piedad popular y la liturgia. Principios y orientaciones; publicado en su día por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos.
- La verdad del amor humano, orientaciones sobre el amor conyugal, la ideología de género y la legislación familiar, editado por la Conferencia Episcopal Española.
- Treinta preguntas y respuestas sobre el amor, ed. Bac popular.
- La edición oficial del “Martirologio Romano”.
Octubre de 2012
















el deseo de querer ser el primero, sino que lo alienta. Sólo que revela una vía nueva y diferente para realizarlo: no a costa de los demás, sino a favor de los demás. Añade, de hecho: «...sea el último de todos y el servidor de todos».
, no se plantea para la Madre Teresa de Calcuta, Raoul Follereau y todos los que diariamente sirven a la causa de los pobres y de los heridos de las guerras, frecuentemente con riesgo para su propia vida.
Asimismo, durante su viaje a Alemania afirmó: «¿Acaso es necesario ceder a la presión de la secularización, llegar a ser modernos adulterando la fe? Naturalmente, la fe tiene que ser nuevamente pensada y, sobre todo, vivida, hoy de modo nuevo, para que se convierta en algo que pertenece al presente. Ahora bien, a ello no ayuda su adulteración, sino vivirla íntegramente en nuestro hoy. Esta es una tarea ecuménica central, en la cual debemos ayudarnos mutuamente a creer cada vez más viva y profundamente» (Discurso en el encuentro con los evangélicos, en Erfurt, 23 de septiembre de 2011: L’Osservatore Romano, edición en lengua española, 2 de octubre de 2011, p. 6).
dar nada por sentado. Hoy la fe debe ser concebida como un reto, como algo que debe despertarnos de nuestra indolencia y reavivar nuestra atención y estado de alerta.Una necesidad urgente se hace sentir a redescubrir la fe como el "tesoro escondido, que" perla preciosa "( cf . Mt 13:44-46), por lo que vale la pena dar todo. El redescubrimiento de la fe debe ser un objetivo para todos nosotros los creyentes. Los cristianos estamos llamados a redescubrir cada día la importancia del don de la fe y de su belleza.Muchos de los bautizados, en efecto, la afirmación de que la fe es una carga pesada que se interponga en el camino de disfrutar de la vida, o creen que la observancia de los mandamientos no permite que uno sea totalmente libre y feliz. 
