MEDITACIONES P.CEFERINO SANTOS: MIÉRCOLES SANTO

DESEO CELEBRAR LA PASCUA

 

El amor de Dios, que se acerca a nosotros para darnos vida eterna; se manifiesta en la frase de Jesús: "Deseo celebrar la Pascua en tu casa" (Mt 26,18). La Pascua judía era la gran fiesta religiosa que celebraba la salida de los judíos de la esclavitud de Egipto hacia la tierra prometida de la libertad con el rito de la comida del Cordero Pascual y de los panes ácimos.

Cristo, en su Iglesia, a través de los siglos nos repite de nuevo en cada semana santa: "Deseo celebrar la Pascua en tu casa con mis discípulos" (Mt 26,18). Él desea revivir con nosotros su marcha al Padre, su banquete pascual y la Eucaristía, su pasión y su triunfo. Por eso, sus discípulos se apresuraron "a preparar la Pascua" (Mt 26,19) Y dispusieron la sala y la mesa, el cordero sacrificado y los panes ácimos, las verduras amargas, el vino y el agua.

¿Cómo estamos nosotros preparando nuestra Pascua? En primer lugar, en comunión con Jesús, deseando acompañarlo en su triduo pascual y buscando también nosotros celebrar su Pascua con Él. También, con acción de gracias por su entrega por nosotros. Es verdad que es Judas quien entrega a Jesús y lo traiciona por treinta monedas (Mt 26,15). Pero es mucho más verdad que Jesús se ofrece libremente por nosotros: "No me he rebelado ni echado atraso Ofrecí la espalda a los que me golpeaban, la mejilla a los que mesaban mi barba" (Is 50,5-6), nos dice el profeta Isaías del siervo de Yahveh.

En su Pascua Cristo nos ofrenda su Cuerpo inmolado y su sangre en la Eucaristía. Y nosotros participamos de esta Pascua en el banquete del pan de vida y de esa bebida de salvación.

Estamos llamados a compartir los sufrimientos y el triunfo de Cristo en esta Pascua. Buscamos la intimidad fiel con Cristo, no para traicionarlo como Judas, sino para ser suyos incondicionalmente, preparando su Pascua, viviendo su banquete, su muerte y su resurrección como discípulos fieles. Él discípulo ha de estar donde está su Maestro.

Queremos vivir, Señor Jesús, estos días pascuales Contigo, en oración y en meditación profunda, y en entrega sacrificada y generosa. Queremos celebrar esta Pascua Contigo y recibir tus últimos mensajes.

"Os doy gracias a todos los que estos días de Pascua me acompañáis en mi pasión con sentimientos de compasión, de agradecimiento y de amor. No os olvidéis de mis imágenes vivientes en los exilados, los extranjeros, los enfermos, los ancianos, los solitarios y los pobres. No los dejéis abandonados, que Yo me oculto en ellos".

 

EL PAN DE LA PALABRA DANÓSLE HOY.
CICLO B Pág. 107 y 108 (Ceferino Santos S.J.)

 

rcc-es.com