Matías, apóstol
LOS PASTORES DE CRISTO
Todo apóstol, como San Matías, es un elegido de Cristo. Él mismo elige los pastores para su pueblo: "Yo soy quien os he elegido" (Jn 15,16). Unas veces los elige directamente como a San Pablo o San Pedro; otras, a través de un escrutinio o echando suertes como en el caso de Matías (Hch 1,26), eligiendo entre hermanos que tengan las condiciones necesarias para pastorear en el nombre de Jesús.
"Hace falta que se asocie a nosotros como testigo de la resurrección de Jesús uno de los que nos acompañaron mientras convivió con nosotros el Señor Jesús, desde que Juan bautizaba hasta el día de su ascensión" (Hch 1,21-22).
El pastor elegido ha de tener, por tanto, conocimiento experiencial e íntimo de Jesús y un amor fiel y profundo a Él (Jn 15,9.14). Ha de ser también buen vigilante, (esto significa "epíscopos", u obispo), que guarda con amor, entrega y solicitud al pueblo de Dios.
Te pedimos, Señor Jesús, por todos los que has elegido para cualquier tipo de pastoreo en tu Iglesia. Llénales de la sabiduría y del amor de tu Espíritu Santo. Conságralos en la verdad para que la comuniquen y difundan como tus santos apóstoles y discípulos. Amén.
"Quiero daros pastores según mi corazón. Pedidme que estén en sintonía Conmigo, que Soy el supremo Pastor bueno. Cuando os dé pastores santos vosotros os pareceréis a ellos y seréis un pueblo renovado que me sirve y me glorifica. Como es el sacerdote así será el pueblo. Pedidme sacerdotes santos".
Meditaciones del P. Ceferino Santos, SJ.
“El Pan de la Palabra... dánosle hoy” Ciclo C
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