jueves, 12 de mayo de 2016

MEDITACIÓN P.CEFERINO SANTOS.JUEVES 7ª SEMANA DE PASCUA



QUE SEAN UNO EN NOSOTROS

Jesús nos quiere parecidos a Él que es uno con su Padre (Jn 17,21-22). Efectivamente, Jesús no vino a traemos un moralismo barato: 'esforzaos en ser buenos'; sino una dimensión vital teológica y profunda, que nos sumerja en las hondas corrientes de la Divinidad: "Que sean uno en nosotros" (Jn 17,21b).
El Papa Juan Pablo II escribió una Encíclica sobre el ecumenismo y la unidad eclesial, con este título: 'Ut unum sint': Para que sean Uno. Tendríamos que estar todos muy unidos a Jesús, Cabeza de la Iglesia, para que Él nos una entre nosotros. Tendríamos que vivir y crecer en el amor mutuo entre los diferentes cristianos, sintiéndolos muy cerca de nuestro corazón, para que "el amor que el Padre tenía al Hijo", esto es, el mismo Espíritu Santo, esté en ellos como Cristo también está en nosotros (Jn 17,26). Los cristianos 'separados' estamos paradójicamente unidos en el Espíritu de Dios y en el Hijo desde nuestro mismo bautismo y en un mismo amor. ¡Es más lo que nos une que lo que nos separa!
Pero aún nos falta mucho para "basar el compromiso ecuménico en la conversión de los corazones y en la oración, lo cual llevará incluso a la necesaria purificación de la memoria histórica" (Ut unum sint, # 29). Tendremos que dejar que el único Espíritu de Dios nos arrastre y nos sumerja en las aguas profundas de la unidad del Padre con el Hijo. Tendremos que renunciar a seguir acusando a nuestros hermanos, sin que tengan ocasión de defenderse (Hch 25,16), como hicieron con San Pablo los judíos. Tendremos que vivir "con la esperanza en el Espíritu, que sabe alejar de nosotros los espectros del pasado y los recuerdos dolorosos de la separación; Él nos concederá lucidez, fuerza y valor para dar los pasos necesarios" (It Unum sint, # 102).

Señor Jesús: únenos en Ti; haznos uno en Ti a los hermanos separados entre nosotros con nuestras eternas y absurdas acusaciones. Derriba los muros de las divisiones y de los altercados entre los hermanos y las Iglesias divididas. Que por tu  amor pronto seamos uno. Y que María, Madre de la unidad en Ti, reconcilie pronto a sus hijos enfrentados.

Meditaciones del P. Ceferino Santos, SJ.

“El Pan de la Palabra... dánosle hoy”  Ciclo C

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